Les hablaremos acerca de los vestidos de estilo oriental que se están usando en las colecciones de cualquier estación. Modelos mini que tienen un diseño recto de manga corta y un característico cuello: Qipao. Popularizado también por la palabra en cantonés cheongsam, es reconocible por el cuello alto de estilo mandarín, a menudo almidonado, además de la hilera de botones de cierre que cortan el pecho asimétricamente.
Acerca de la historia del legendario y erótico vestido que pasó de la dinastía Qing en China a las calles de todo el mundo. Sus orígenes se remontan entre 1644 y 1912. Un imperio de la dinastía Qing en China que duró casi tres siglos, sin embargo fue a finales del siglo XIX cuando las cortesanas en Shanghái lo modernizaron adoptando la forma popular que conocemos hoy. Esta abraza con fuerza la figura de la mujer en el tren superior, y se relaja con dos aberturas en los laterales para facilitar el movimiento.
El filme El mundo de Suzie Wong (1960) acercó a Occidente el poder enigmático y sensual de esta prenda centenaria, donde la protagonista, la actriz cantonesa de madre británica Nancy Kwan destaca popularizando esta prenda.
Otra película muy interesante que populariza esta prenda es “In the Mood for Love” (2001, Deseando Amar) de Wong Kar-Wai. Ver esta película para contar cada uno de los Qipaos que usa la Sra. Chan no es una tarea fácil, pero es una película tan hermosa que cada repetición es tan fascinante como la primera vez.
Una veintena de qipaos que toca todo tipo de tejidos, adornos y estampados, desde cuadros vichy a rayas, flores sixties, transparencias o el omnipresente rojo de la cultura del dragón. Piezas de coleccionista que fueron creadas en talleres de Shanghái dan testimonio de cómo se creó el vestido más popular de la cultura oriental.
Esta prenda que redefine el concepto de lo sexy a través del recato se convirtió en el símbolo de la mujer moderna en oriente. Se trata de uno de los vestidos a los que las celebrities han recurrido para destacar en eventos como Nicole Kidman Kylie Minogue, Emma Watson, Celine Dion y cómo no, también Madonna; quien se subió al escenario de los American Music Awards de 1995 con un modelo en color rojo oscuro y estampado con flores.
